Historias de San Luis: recuerdos surtidos

Afortunadamente estas historias de San Luis, escritas, reitero, sin rigor académico, pero con la autenticidad que le dan las memorias colectivas, son disparadores de recuerdos y sirven para quienes no han conocido o vivido algunos de los relatos, pregunten de que se trata, y los incorporen a sus vivencias.

Por ejemplo, José Ladislao Mendoza, alias Pepe, nos recordó que en nuestro camino por la calle Chacabuco olvidamos mencionar que allí, entre Pringles y Belgrano, estaba emplazada nuestra Terminal de Ómnibus, que luego fue un establecimiento educativo.

Por su parte Silvana Di Gennaro aportó que en dónde estuvo la panadería de Don Vega, en Chacabuco entre 9 de Julio y 25 de Mayo, antes funcionó el negocio de su abuelo, Mariano Di Gennaro, que también fue propietario de un almacén de Ramos Generales en Falucho y Pringles.

Otros amigos lectores, entre ellos Víctor Hugo Castro, nombraba a la Despensa del Barrio situada en la esquina de Junín y General Paz, por el escrito titulado “Despensas” publicado la semana pasada.

Sobre la nota “El Ascensor”, Rolando Darío Nobile planteaba que tenía dudas si el ascensor del edificio del monoblock de los militares de calle San Martín entre Belgrano y Pringles era anterior o posterior a los que colocaron en el edificio de avenida Lafinur entre 9 de Julio y Ayacucho, que luego se amplió con entrada por el pasaje Avellaneda también.

Tengo entendido que el monoblock de los militares está construido con fecha anterior al edificio al que hace referencia.

Por lo tanto el o los ascensores del monoblock de la San Martín son los primeros que se instalaron en San Luis. Por lo menos hasta ahora no nos han dicho lo contrario.

Todos estos comentarios mezclados son para agradecer las enormes contribuciones que recibimos para nuestra tarea, y esa fantástica relación que se ha establecido con los lectores de estas Historias de San Luis, escritas con muchos sentimientos.

Además, aclaro que vamos a intentar abordar todos los temas que nos sugieren,

Por eso hacemos menciones simplemente en algunos casos, para después volver sobre ese lugar.

Esto le contestábamos a Angelo Calderoni que me escribió: ¡pasaste muy rápido por la despensa de Don Félix! de 9 de Julio y Chacabuco.

Y esa es la explicación. Pasamos, mencionamos, para después volver.

Y Angelo nos dice que en ese lugar él nació hace 72 años.

Era de sus nonos, Giuseppe Gitto y Angela Ferrara, quedando después su tío Félix.

Mario Edgar, abogado, (no pusimos el apellido porque no tuve tiempo de comunicarme con él para pedir su autorización y hacerlo) nos cuenta una fantástica historia de amor de sus padres, en dónde aparece la pensión y el comedor Viglianco, ubicado en Colón pasando Pringles. Ya conté que es un lugar inolvidable para mí porque en una de sus mesas con manteles cuadriculados rojos y blancos, comí con mi padre Juan Cruz mi primera comida sólida a los 7 años, ya que sufrí una grave enfermedad intestinal que terminó en una operación cuando tenía 9 meses de edad. Todo era licuado o jugo hasta ese día. (Si ya sé que está pensando que después me comí los siete años juntos cuando fui creciendo).

Y también figuran en el relato de Mario, la escuela Mitre, la Casa Mollo (Pedernera y Rivadavia), el Mercado central, la casa Rosso, Panadería Odicino, agencia El Toro de Oscar Fabré, una farmacia, lo Celorrio y muchos personajes de San Luis.

Eso queda para la próxima semana. Saludos y gracias.

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